jueves, 21 de julio de 2011

La Libertad de expresión

La desproporcionada condena al diario El Universo de Ecuador por una denuncia por difamación interpuesta por el presidente Rafael Correa llama a la reflexión por el manejo de la justicia ante el poder transitorio y la responsabilidad de un medio de informar con honestidad y rectitud.

Exagerada la condena que satisface las ansias de venganza del injuriado, no de justicia, que perjudica y castiga a todo el personal de El Universo, o sea pagan justos por pecadores, porque de adonde van a salir los 40 millones de dólares si no es rematando al medio y dejando en el desempleo a los colegas, personal administrativo y auxiliar. Hasta a los canillitas alcanza esta condena porque pierden la migaja de mercado que conseguían con la venta del diario.

Que debió pensarlo el editor antes de publicar la columna cuestionada es cierto, porque una cosa es opinar y otra es afirmar, la primera puede basarse en la conjetura, la segunda en las pruebas y contundentes ante la magnitud de la información.

Si la justicia se inclinó para complacer al presidente Rafael Correa sería muy triste, porque pinta un panorama tenebroso para la libertad de expresión, y para Ecuador, es momento de reflexionar sobre si el remedio fue peor que la enfermedad.

Como es de preveer, este caso caminará su vía crucis hasta llegar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, como en anteriores ocasiones, y se puede esperar que se siente jurisprudencia nuevamente, porque los imputados no niegan la falta, es más, ofrecen enmendarla, pero el injuriado prefiere el castigo, el escarmiento, no tiene correa ni humildad para aceptar la disculpa. La condena a Ecuador revolotea sobre palacio.

Luis M. Blanco
Presidente ACOPEP